Los mejores colores para el dormitorio
Poco hay más importante que dormir bien. Elegir los mejores colores para el dormitorio puede ayudarnos a conciliar mejor el sueño y convertir esa habitación de la casa en nuestro propio rincón sagrado. Por supuesto, no todo tiene que ver con el color. Hay que tratar que todo funcione al completo.
Otro de los aspectos más importantes es elegir un colchón adecuado. El colchón no debe ser ni muy duro ni muy blando. Los colchones tienen una puntuación en base a su dureza y lo recomendado por los expertos es una puntuación de seis. En caso de pesar muy poco, podemos tener una dureza menor, de 5,5 o 5. Sin embargo, si somos muy pesados, podemos necesitar subir al 6,5 o al 7.
Tan importante como el colchón es la almohada. Esta debe ser fina para no hacernos daño en la columna. Igualmente fundamental en el descanso es la postura que guardemos al dormir. Boca arriba con un cojín bajo las rodillas o en posición fetal hacia la izquierda, con un almohadón entre las piernas, son las dos opciones más recomendadas para que el descanso se optimice. La posición menos indicada es boca abajo.
Una vez que cumplamos estos pasos básicos de colchón, almohada y postura para dormir, podemos preguntarnos por lo siguiente: el color de la pared para el dormitorio.
Peores colores para el dormitorio
Casi más importante que tener un buen color de dormitorio, es no tener un mal color en el mismo. Debemos huir especialmente de los colores más fuertes o estridentes. Es habitual, especialmente si tenemos adolescentes en casa, que quieran pintar la vivienda de colores como el rojo intenso, el azul oscuro o incluso el fucsia.
Sin embargo, estos colores generarán inquietud a la hora de dormir. Los tonos intensos en general son poco recomendados. Aunque crean una atmósfera más oscura, lo que puede parecer positivo porque es importante dormir sin luz, no nos permiten terminar de relajarnos. Aun así, siempre es más recomendable un color frío intenso que uno cálido.
Es decir, entre un rojo y un azul, siempre es mejor el azul. Entre un violeta y un rojo, al ser el violeta una mezcla entre cálidos y fríos, mejor el violeta.
Otro color que hay que evitar a toda costa es el negro. Una habitación pintada de este color fomentará los pensamientos negativos o depresivos, algo nada recomendable antes de irse a dormir.
Mejores colores para el dormitorio
En cuanto a los mejores colores para el dormitorio, tenemos que destacar el blanco. Ya hemos hablado de las ventajas de pintar de blanco una habitación. También hemos mencionado que es uno de los trucos para hacer que una habitación parezca más grande.
El blanco es un color neutro pero su labor agrandando el espacio puede permitirnos un mayor descanso. Sentirnos en un espacio más amplio evitará esos agobios que puede darnos el dormir en un lugar demasiado pequeño.
Si preferimos algún color porque el blanco nos parece soso, la mejor manera es un verde claro. Este color es muy recomendable porque descansa la vista. Por tanto, nos permitirá relajarnos mucho más.
Otra buena opción cada vez más de moda es el gris claro, en muchos casos en combinación con el blanco. Además de ser un color ideal para un dormitorio de estilo escandinavo, también genera tranquilidad y relajación.
Por último, tenemos que señalar al azul claro. De entre todas las opciones disponibles, es la que genera una mayor serenidad.
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